Los efectos positivos derivados de los flavanoles contenidos en el cacao y el chocolate, se han obtenido a partir de estudios realizados mayoritariamente en modelos in vitro.
Resumen 1. Introducción. Historia del chocolate 2. El cacao y sus productos: Origen del chocolate 3. El chocolate: Un alimento 4. Efectos antioxidantes del chocolate 5. Los efectos del chocolate en la salud cardiovascular 6. ¿Es adictivo el chocolate? 7. Conclusiones 8. Referencias
5. LOS EFECTOS DEL CHOCOLATE EN LA SALUD CARDIOVASCULAR
Numerosos trabajos de investigación focalizan el efecto de los flavanoles, tanto monoméricos como oligoméricos, en la protección de la oxidación de las lipoproteínas de baja densidad, LDL (28-30). La oxidación de esta lipoproteína, la principal transportadora de colesterol en el sistema vascular y también identificada como LDL-colesterol, es uno de los componentes del proceso que produce daño e inflamación crónica en los vasos sanguíneos, conduciendo a la formación de placas (ateromas) que obstruyen los grandes vasos, y que en su conjunto constituyen la ateromatosis, o patológicamente mejor conocida como arterioesclerosis (31, 32). Como consecuencia de la oxidación de las LDL, y del daño inducido por la oxidación de esta lipoproteína en el endotelio vascular, este se hace más permeable, atrayendo así a monocitos y a otras células vinculadas con la respuesta inflamatoria e inmune. Se estimula, de esta manera, la adhesión de las plaquetas y de los leucocitos, favoreciendo la formación de una obstrucción que puede conducir a un accidente vascular agudo, como una trombosis, o un infarto (33). Todos estos procesos van acompañados de episodios de vasoconstricción, por inhibición en la formación del óxido nítrico (NO), un radical libre que es el principal agente vasodilatador, lo que agrava aún más el efecto de la lesión.
Figura 3
Los oligómeros de las procianidinas del cacao han demostrado, en diferentes modelos experimentales, su capacidad para inhibir la oxidación de las LDL (30, 34) y para incrementar la producción del NO en el tejido endotelial, efecto que se traduce en una acción vasodilatadora (35), y de relajación vascular (36), disminuyendo, además, la insulino resistencia (37), uno de los marcadores importantes del síndrome metabólico, identificado actualmente como la «patología del siglo XXI». También, se ha demostrado que las procianidinas del cacao inhiben, tanto la activación como la agregación de las plaquetas en los vasos sanguíneos, efecto fisiológico que se complementa con la acción inhibidora de la oxidación de las LDL (35, 38).
Figura 4
Otro efecto descrito para los flavanoles del cacao es su acción sobre la síntesis de los eicosanoides, moléculas derivadas del ácido araquidónico y que están directamente involucradas con los procesos inflamatorios y en la regulación de la homeostasis vascular (39). Dentro de los eicosanoides, cuya formación es afectada por los procianidinas del cacao, están las prostaciclinas y los leucotrienos (40). Las prostaciclinas inhiben la agregación de las plaquetas, por lo cual ejercen efectos inhibitorios en la coagulación sanguínea. En cambio, los leucotrienos son poderosos agentes vasoconstrictores y estimulantes de la inflamación (41). Se ha demostrado que las procianidinas del cacao estimulan la formación de las prostaciclinas e inhiben la formación de los leucotrienos, lo cual se traduce en un efecto que produce una mayor fluidez de la sangre por los diferentes vasos, evitando la formación de trombos, y el riesgo de un accidente vascular (42). Otro efecto descrito para las procianidinas del cacao, se refiere al efecto inhibidor de estos antioxidantes sobre la actividad de la enzima 15-lipooxigenasa-1 (15-LOX-1) (43). Esta enzima está involucrada en la transformación del ácido araquidónico en los leucotrienos, pero no en la formación de las prostaciclinas (41), lo cual podría explicar el efecto favorable de las procianidinas en la relación prostaciclinas/leucotrienos (43). Además, la enzima 15-LOX-1 está directamente involucrada en la oxidación de las LDL, por lo cual su inhibición ejercería un efecto favorable en la protección de la oxidación de las LDL a nivel vascular (43).
Figura 5
Los efectos positivos derivados de los flavanoles contenidos en el cacao y el chocolate, se han obtenido a partir de estudios realizados mayoritariamente en modelos in vitro. La pregunta, que obviamente surge, es ¿qué ocurre in vivo?, esto es en el individuo que consume un producto que contiene cacao, como es el chocolate. La primera interrogante que se origina es si los flavanoles contenidos en el chocolate se absorben a nivel intestinal. Los estudios han demostrado que una proporción significativa de la epicatequina y catequina contenidas en el chocolate se absorbe, alcanzando concentraciones plasmáticas máximas a las tres horas post-ingesta (44). Estos flavanoles no se acumulan en el organismo ya que son eliminados en forma de conjugados a través de la orina (45). Individuos que han recibido 35 a 105 g de chocolate negro (una porción típica de chocolate es de 40 a 60 g) muestran un significativo aumento de la epicatequina a nivel plasmático, lo que se correlaciona con un significativo aumento de la capacidad antioxidante del plasma, un parámetro analítico muy utilizado para evaluar la efectividad fisiológica de antioxidantes dietarios (40, 46). LDL obtenidas de individuos que han consumido chocolate muestran una mayor resistencia a la oxidación, lo cual prueba el efecto a nivel fisiológico de los flavanoles del cacao (40). El consumo de chocolate negro afecta muy positivamente el metabolismo de las lipoproteínas de alta densidad (HDL), identificadas habitualmente como el «colesterol bueno», incrementado su concentración (47). Las HDL están involucradas en el transporte reverso del colesterol y un incremento en sus niveles es actualmente considerado como un efecto protector en el riesgo cardiovascular (48).
Las procianidinas no se absorben como oligómeros, aunque sí incrementan el contenido de monómeros en el plasma, por lo cual se estima que el proceso de hidrólisis a nivel gástrico e intestinal de estos polifenoles produce la conversión de los oligómeros en monómeros o dímeros, ya que estos últimos sí se absorben a nivel intestinal (49). Se ha propuesto que los oligómeros que no son absorbidos, por no ser debidamente hidrolizados, podrían ser metabolizados por la flora bacteriana intestinal, generando diferentes polímeros de menor tamaño, los que potencialmente podrían ejercer una acción protectora del epitelio intestinal. Cabe recordar que el cáncer de colon se asocia con efectos derivados del estrés oxidativo, por lo cual la presencia de actividad antioxidante, por ejemplo derivada de los oligómeros de los flavanoles del chocolate podría, potencialmente, ejercer un efecto protector frente al desarrollo de esta patología (50). Sin embargo, esto último solo es especulativo ya que requiere demostración clínica y epidemiológica.
Un estudio realizado hace algunos años (40), comparó el efecto de la cafeína, para la cual se han descrito efectos inhibidores de la agregación plaquetaria (51), con el efecto de los flavanoles del cacao. La conclusión es que el efecto de los flavanoles en la inhibición de la activación plaquetaria es significativamente mejor que el producido por la cafeína. Estos resultados, han motivado a los investigadores a comparar el efecto de los flavanoles del cacao y del chocolate, con el efecto beneficiosos de la aspirina en la coagulación sanguínea, aunque actuando a través de diferentes mecanismos, por lo cual se trataría de efectos no similares, pero sí complementarios (52). El concepto actual es que los flavanoles contenidos en el cacao y en el chocolate contribuyen a la protección de la salud cardiovascular al inhibir la oxidación de las LDL, la agregación de las plaquetas, y los procesos inflamatorios derivados de la formación de los leucotrienos (53, 54). Estos efectos de traducen en que el consumo moderado de chocolate, particularmente de chocolate negro que es el que contiene la mayor cantidad de flavanoles, es beneficioso para disminuir la presión arterial, y el riesgo de trombosis y de ateromatosis en el humano, según conclusiones recientes del Zutphen Elderly Study, estudio recientemente finalizado realizado en la ciudad de Zutphen, Holanda (55) para evaluar el riesgo de enfermedad cardiovascular.
6. ¿ES ADICTIVO EL CHOCOLATE?
Sobre el posible poder adictivo del chocolate existen muchos mitos. Se habla, incluso, de individuos «chocohólicos», es decir adictos al chocolate, especialmente mujeres, en quienes su deseo de consumo es tan intenso que no pueden reprimirse. Científicamente, no hay aún explicación para este comportamiento, el cual es poco comprendido, pero real. Algunos investigadores han aventurado diferentes hipótesis. Varias sustancias bioactivas, presentes en el chocolate, se han considerado como posibles candidatas a producir esta especie de «adicción» al chocolate. El chocolate contiene pequeñas cantidades de cafeína, pero una cantidad relativamente alta de teobromina, una sustancia alcaloidea, similar a la cafeína, cuya potencia como estimulante es 1/10 del efecto de la cafeína. Una porción típica de chocolate negro (40 g) contiene 2 a 11 mg de cafeína y 20 a 60 mg de teobromina, lo cual es una cantidad muy pequeña si se compara con el aporte de ambas sustancias a partir de café (137 mg de cafeína y 60 mg de teobromina por porción de aproximadamente 10 g) (56).
Otras sustancias que pueden influenciar el comportamiento hacia el chocolate son la tiramina y la feniletilamina, que son estructuralmente similares a la anfetamina, y también la anadamina cuya estructura es similar a la canabis. La combinación de estas sustancias en el chocolate puede parecer casi explosiva, pero no es así, ya que se encuentran en pequeñísimas cantidades, en el rango de los microgramos por porción (10). Un estudio demostró que el consumo de cápsulas de cacao (no de chocolate) conteniendo todas estas sustancias, no modifica el deseo de comer chocolate, por lo cual la «ansiedad» por el chocolate, es una particularidad de este último y no del cacao que contiene (57). En la opinión de algunos investigadores (58), la experiencia hedónica que proviene del aroma, del sabor, de la textura, y de la sensación que produce la fusión del chocolate en el paladar, parece ser la virtud de este alimento que lo hace irresistible.
Más recientemente, investigaciones realizadas por investigadores españoles, han identificado un nuevo tipo de compuestos en el cacao y el chocolate, identificados como tetrahidro-beta-carbolinas (59). Estos compuestos son alcaloides potencialmente neuroactivos que se encuentran también en las bebidas alcohólicas, por lo cual se ha estudiado su posible rol en la etiología del alcoholismo. A la fecha, no se sabe si estas carbolinas, presentes en el chocolate, pueden tener algún efecto en el «deseo» de consumirlo. Un argumento, en contra del posible efecto de las carbolinas, es que estas sustancias están presentes en muchos otros alimentos que no producen deseo de consumo, como las frutas, por ejemplo, y en mayores cantidades (59). Se ha medido la actividad cerebral, mediante PET (Positron Emmision Tomography), de individuos mientras consumen choco late, observándose un mayor flujo sanguíneo en aquellas áreas involucradas en la percepción de sensaciones de placer (60). Estas mismas áreas son activadas por drogas adictivas, como la cocaína, por lo cual este efecto podría explicar la asociación entre el consumo de chocolate y una posible adicción en algunos individuos. Sin embargo, no hay nada concreto, y al parecer, todo deriva simplemente del placer de comer chocolate.
7. CONCLUSIONES
Aunque el cacao y el chocolate se han consumido durante cientos de años, solo recientemente comenzamos a conocer y a entender los beneficios de este sabroso alimento, los que derivan principalmente de su alto contenido de flavonoides. Ahora bien, la idea no es recomendar un consumo exagerado de chocolate, sobre todo a los individuos obesos o con sobrepeso quienes deberían restringir o evitar su consumo, como tampoco se sugiere con el consumo del vino tinto o de otras bebidas que también producen efectos beneficiosos en la salud, cuando se consumen moderadamente. Existen muchas fuentes de flavonoides, por lo cual la recomendación es combinar adecuadamente el consumo de frutas y verduras en forma constante, pero tampoco privarnos del placer de comer un buen chocolate. Una porción frecuente de chocolate, es sin lugar a dudas, un trocito de más salud.
8. REFERENCIAS
1. Hurst, W., Tarka, S., Powis, T., Valdez, F., Hester, T.Cacao usage by earliest Maya civilization. Nature 2002; 418: 289-290. 2. Coe, S., Coe, M. The true history of chocolate. Thames and Hudson, London, UK. 1996. 3. Dillinger, T., Barriga, P., Escárcega, S., Jiménez, M., Salazar, D., Grivetti, L. Food of the Gods: Cure for the humanity? A cultural history of the medicinal and ritual use of chocolate. J Nutr 2000; 130: 2057S- 2072S. 4. Vinson, J. A., Proch, J., Zubik, L. Phenol antioxidant quantity and quality in foods: cocoa, dark chocolate, and milk chocolate. J Agric Food Chem 1999; 47: 4821-4824. 5. Yu, S., Derr, J., Etherton, T., Kris-Etherton, P. Plasma cholesterol predictive equations demonstrate that stearic acid is neutral and monounsaturated fatty acids are hypocholesterolemic. Am J Clin Nutr 1995; 61: 1129-1139. 6. Kris-Etherton, P., Derr, J., Mitchell, D. The role of fatty acid saturation on plasma lipids, lipoproteins and apolipoproteins: I Effects of whole food diets high in cocoa butter, olive oil, soybean oil, dairy butter, and milk chocolate on the plasma lipids of young men. Metabolism 1993; 42: 121-129. 7. Kris-Etherton, P., Derr, J., Mustard, V., Seligson, F., Pearson, T. Effects of a milk chocolate bar per day substituted for a high carbohydrate snack in young men on a NCEP/AHA Step I diet. Am J Clin Nutr 1994; 60: 1037S-1042S. 8. Wollgast, J., Anklam, E. Polyphenols in chocolate: is there a contribution to human health? Food Res Int 2000; 33: 449-459. 9. Weisburger, JH. Chemopreventive effects of cocoa polyphenols on chronic diseases. Exp Biol Med 2001; 226: 891-897. 10. Hannum, S., Schmitz, H., Keen, C. Chocolate: A heart-healthy food? Show me the science. Nutrition to Day 2002; 37: 103-109. 11. Oldman, K., Bowen, P. Oxidative stress in critical care: Is antioxidant supplementation beneficial? J Am Diet Assoc 1998; 98: 1001-1008. 12. Finkel, T., Holbrook, N. Oxidants, oxidative stress and the biology of ageing. Nature 2000;408:239-246. 13. Halliwell, B. Free radicals and antioxidants: A personal view. Nutr Rev1994; 52: 253-265. 14. Nordberg, J., Arner, E. Reactive oxygen species, antioxidants, and the mammalian thioredoxin system. Free Rad Biol Med 2001; 31: 1287-1312. 15. Shahidi, F. Antioxidants in foods and food antioxidants. Nahrung 2000; 44: 158-163. 16. Michaelis, M. Drug discovery and neuronal degeneration in Alzheimer`s disease. Science Medicine 2003; 9: 214-226. 17. Simmons, R. Developmental origins of diabetes: The role of oxidative stress. Free Rad Biol Med 2006; 40: 917-922. 18. Valenzuela, A., Sanhueza, J., Nieto, S. Natural antioxidants in functional foods: From food safety to health benefits. Grasas Aceites 2003; 54: 295-303. 19. Scalbert, A., Williamson, G. Dietary intake and bioavailability of polyphenols. J Nutr 2000; 130: 2073S-2085S. 20. Winyard, P., Moody, C., Jacob, C. Oxidative activation of antioxidant defenses. Trends Biochem Sci 2005; 30: 453-461. 21. Sirving, OK., Hertog, MG., Feskens, EJ., Kromhout, D. Dietary flavonoids, antioxidants vitamins, and incidence of stroke. Arch Intern Med 1996; 154: 637-642. 22. Pietta, P. Flavonoids as antioxidants. J Nat Prod 2000; 63: 1035-1042. 23. Bravo, L. Polyphenols: chemistry, dietary sources, metabolism, and nutritional significance. Nutr Rev 1998; 56: 317-333. 24. Dreosti, I. Antioxidant polyphenol in tea, cocoa, and wine. Nutrition 2000; 16: 692-696. 25. Osakabe, N., Yamagishi, M., Sanbongi, C., Natsume, M., Takizawa, T., Osawa, T. The antioxidative substances in cacao liquor. J Nutr Sci Vitaminol 1998; 44: 313-321. 26. Hammerstone, J., Lazarus, S., Michell, A., Rucker, R., Schmitz, H. Identification of procyanidins in cocoa (Theobroma cacao) and chocolate using high performance liquid chromatography/mass spectrometry. J Agric Food Chem 1999; 155: 490-496. 27. Huang, D., Ou, B., Hampsch-Woodill, M., Flanagan, J., Prior, R. High throughput assay of oxygen radical absorbance capacity (ORAC) using multichannel liquid handling system coupled with a microplate fluorescence reader in 96-well format. J Agric Food Chem 2002; 50: 4437-4444. 28. Kondo, K., Hirano, R., Matsumoto, A., Igarashi, O., Itakura, H. Inhibition of LDL oxidation by cocoa. Lancet, 1996; 348: 1524. 29. Osakabe, N., Baba, S., Yasuda, A. Daily cocoa intake reduces the susceptibility of low-density lipoprotein to oxidation as demonstrated in healthy humans volunteers. Free Radic Res 2001; 34: 93-99. 30. Mathur, S., Devaraj, S., Grundy, S., Jailal, I. Cocoa products decrease low density lipoprotein oxidative susceptibility but do not affect biomarkers of inflammation in humans. J Nutr 2002; 132: 3663-3667. 31. Esterbauer, H., Gebicki, J., Puhl, H., Jurgens, G. The role of lipid peroxidation and antioxidants in oxidative modification of LDL. Free Radic Biol Med 1992; 13: 341-390. 32. Steinberg, D., Lewis, A. Conner Memorial Lecture: Oxidative modification of LDL and atherogenesis. Circulation 1997; 95: 1062-1071. 33. Ross, R. Atherosclerosis- an inflammatory disease. N Engl J Med 1999; 340: 115-125. 34. Wan, Y., Vinson, J., Etherton, T., Proch, J., Lazarus, S., Kris-Etherton, P. Effects of cocoa powder and dark chocolate on LDL oxidative susceptibility and prostaglandin concentrations in humans. J Am Clin Nutr 2001; 74: 596-602. 35. Hermann, F., Spieker, L., Ruschitzka, F., Sudano, I., Hermann, M., Binggeli, C., Luscher, T., Reisen, W., Noll, G., Corti, R. Dark chocolate improves endothelial and platelet function. Heart 2006; 92: 119-120. 36. Karim, M., McCormick, K., Kappagoda, C. Effects of cocoa procyanidins on endothelium-dependent relaxation. J Nutr 2000; 130(S): 2105S-2108S. 37. Grassi, D., Necozione, S., Lippi, C., Croce, G., Valeri, L., Pasqualetti, P., Desideri, G., Blumberg, J., Ferri, C. Cocoa reduces blood pressure and insulin resistance and improves endothelium-dependent vasodilation in hypertensives. Hypertension. 2005; 46: 398-405. 38. Rein, D., Paglieroni, T., Wun, T. Cocoa inhibits platelet activation and function. Am J Clin Nutr 2000; 72, 30-35. 39. Brash, A. Arachidonic acid as a bioactive molecule. J Clin Invest 2001; 107: 1339 -1345. 40. Rein, D., Lotito, S., Holt, R., Keen, C., Schmitz, H., Fraga, C. Epicatechin in human plasma: In vivo determination and effect of chocolate consumption on plasma oxidation status. J Nutr 2000; 130: 2109S-2114S. 41. Calder, P. Polyunsaturated fatty acids, inflammation, and immunity. Lipids 2001; 36: 1007-1024. 42. Schramm, D., Wang, J., Holt, R. Chocolate procyanidins decrease the leukotriene-prostacyclin ratio in humans and human aortic endothelial cells. Am J Clin Nutr 2001; 73: 36-40. 43. Schewe, T., Sadik, C., Klotz, L., Yoshimotot, T., Kuhn, H., Sies, H. Polyphenols in cocoa: inhibition of mammalian 15-lipooxygenase. J Biol Chem 2001; 382: 1687-1696. 44. Richelle, M., Tavazzi, I., Enslen, M., Offord, E. Plasma kinetics in man of epicatechin from black chocolate. Eur J Clin Nutr 1999; 53: 22-26. 45. Baba, S., Osakabe, N., Yasuda, A., Natsume, M., Takizawa, T., Nakamura, T., Terao, J. Bioavailability of (-)-epicatechin upon intake of chocolate and cocoa in human volunteers. Free Rad Res 2000; 33: 635-641. 46. Wang, J., Schramm, D., Holt, R. A dose-response effect from chocolate consumption on plasma epicatechin and oxidative damage. J Nutr 2000; 130: 2115S-2119S. 47. Mursu, J., Voutilainen, S., Nurmi, T., Rissanen, T., Virtanen, J., Kaikkonen, J., Nyyssonen, K., Salonen, J. Dark chocolate consumption increases HDL cholesterol concentration and chocolate fatty acids may inhibit lipid peroxidation in healthy humans. Free Rad Biol Med 2004; 37: 1351-1359. 48. Negre-Salvayre, A., Dousset, N., Ferretti, G., Bacchetti, T., Curatola, G., Salvayre, R. Antioxidant and cytoprotective properties of high-density lipoproteins in vascular cells. Free Rad Biol Med 2006; 41: 1031-1040. 49. Spencer, J., Chaudry, F., Pannala, A., Srai, K., Debnam, E., Rice-Evans, C. Decomposition of cocoa procyanidins in the gastric mileu. Biochem. Biophys. Res Coummun 2000; 272: 236-241. 50. Record, IR., Mc Inerney, JK., Noakes, M., Bird, A. Chocolate consumption, fecal water antioxidant activity, and hydroxyl radical production. Nutr Cancer 2003; 47: 131-135. 51. Daglia, M., Racchi, M., Papetti, A., Lanni, C., Govoni, S., Gazzani, G. In vitro and ex vivo antihydroxyl radical activity of green and roasted coffee. J Agric Food Chem 2004; 52: 1700-1704. 52. Pearson, D., Paglieroni, T., Rein, D., Wun, T., Schramm, D., Wang, J., Holt, R., Gosselin, R., Schmitz, H., Keen, C. The effects of flavanol-rich cocoa and aspirin on ex vivo platelet function. Thromb Res 2002; 106: 191-197. 53. Ariefdjohan, M., Savaiano, D Chocolate and cardiovascular health: It is to good to be true? Nut Rev 2005; 63: 427-430. 54. Engler, MB, Engler, MM. The emerging role of flavonoid-rich cocoa and chocolate in cardiovascular health and disease. Nut Rev 2006; 64: 109-118. 55. Buijsse, B., Feskens, E., Kok, F., Kromhout, D. Cocoa intake, blood pressure, and cardiovascular mortality. Arch Intern Med 2006; 166: 411-417. 56. Pennington, J. En: Bowes & Church´s Food Values of Portions Commonly Used. 16th ed. Lippincott, J. Co, 1994. 57. Michener, W., Rozin, P. (1994). Pharmacological versus sensory factors in the satiation of chocolate craving. Physiol Behav 1994; 56: 419-422. 58. Rozin, P., Levine, E., Stoess, C. Chocolate craving and liking. Apetite 1991; 17: 199-212. 59. Herraiz, T. Tetrahidro-beta-carbolines, potential neuroactive alkaloids in chocolate and cocoa. J Agric Food Chem 2000; 48: 4900-4904. 60. Small, D., Zatorre, R., Dagher, A., Evans, A., Jones-Gotman, M. Changes in brain activity related to eating chocolate. Brain 2001; 124: 1720-1733.
Autor: Alfonso Valenzuela B. Laboratorio de Lípidos y Antioxidantes, INTA, Universidad de Chile
Normas de uso: No está permitido enviar comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes. Reservado
el derecho a eliminar las opiniones que no sean acordes al tema.